SEGUIDILLAS
Existen dos modalidades musicales que aparecen en las fiestas de las Cruces de Alosno: las seguidillas y los fandangos.
Las seguidillas se cantan en las “colás”, las mujeres acompañan con panderetas, palillos y tocando las palmas, las “reuniones” de hombres cuando llegan acompañan con guitarras. Las seguidillas se cantan con el fin de que los hombres saquen a bailar a las mujeres que se encuentran en las “colás”. Las seguidillas alosneras son una variación de las sevillanas pero sólo se cantan tres estrofas o secuencias. Las seguidillas se comienzan a cantar con una sola voz siguiendo el resto de las mujeres y asistentes a coro. Una seguidilla sigue a otras a veces de manera ininterrumpida. En Alosno existen muchas letras de seguidillas que se han trasmitido por tradición oral, algunas tratan de las relaciones de amor, los noviazgos que surgen en las fiestas de las Cruces, exaltación de la propia cruz, alabanzas a la mujer, etc.
SEGUIDILLAS
Se bailan tres sevillanas
al pie de la Santa Cruz
y al final de la tercera
la perrilla pa la lú.
Sábado de la Cruz Chica
Cruz de Mayo del Alosno
qué tradición tan antigua
qué sentimiento tan hondo.
Todo el año trabajando
por venir a la colá
y lo que yo he ido ganando
esta noche voy a gastar
con “la señora” bailando.
SEGUIDILLAS BIBLICAS
Otras seguidillas que se suelen cantar en Alosno durante la fiesta de las Cruces son las denominadas “bíblicas” que hacen referencia a hechos de la Biblia:
Mientras Sansón dormía
Dalila infame,
los hilos de la fuerza
supo cortarle.
Sirva de aviso,
que a mayor confianza
mayor peligro.
LOS FANDANGOS
Los fandangos son cantados siempre por los hombres durante sus trayectos entre “colás”, ellos suelen parar en la calle para beber y cantar los fandangos que entonan individualmente y de manera espontánea. Sus contenidos temáticos son muy diversos y no suelen hacer alusión a la fiesta de las Cruces. Los fandangos se cantan en otros contextos festivos pero siempre con las mismas características que los diferencia de otros lugares.
FANDANGOS
Reunión
viva nuestra reunión
desde el más chico al más grande
que nos estamos divirtiendo
y sin meternos con nadie
Que viva nuestra reunión.
Seguidillas Alosneras
Las mujeres que cantan en las colás no fuerzan la voz; van diciendo las coplas como un rezo continuo, un mantra, una seguidilla ininterrumpida al son de las pandaretas, con la pausa justa para el cambio de pareja.
Texto extraído del libro «Alosno, palabra cantada» de D. Manuel Garrido Palacios